martes, 10 de marzo de 2009

Para ella

Resulta bastante paradójico que siempre hayas tenido algo claro, tan claro que te des con un canto en los dientes el día que, de improviso, toda esa claridad se vuelve difusa. ¿Por qué?, quizás te preguntes. Es difícil tener unas convicciones homogéneas, con peso y que mantengas durante mucho tiempo. Cuando las encuentras, has de sentirte orgullosa. Pero resulta que llega un día en el que te percatas de que todo eso se puede desmoronar, y es curioso descubir que eres tú la única culpable de la caída de todas esas fichas de dominó que has ido colocando una a una, con esfuerzo, poquito a poquito...

Verdaderamente, no siento que haya echado a perder mi castillo de naipes. Más bien considero, con la cabeza fría, que necesita una reconstrucción; una reconstrucción evidente y de carácter un tanto urgente, por lo menos si deseo mantenerlo en pie. Otra cosa es que no quiera hacerlo. Sin embargo, estoy segura de ello. Quiero que, en mi calidad de aprendiz, pueda llegar a ser un día una buena arquitecta de las palabras.

No obstante, el camino no es para nada sencillo. Nada es tan fácil como parece; y si bien siempre he sido una persona lo suficientemente constante como para no darme por vencida ante una tontería, estos últimos días han sido unos días de revelaciones, revelaciones internas que, aunque sólo se desarrollen en mi interior, me causan algún que otro estrago.

Ella ha estado conmigo desde prácticamente mi niñez. La he querido, la he adorado con toda mi alma y lo sigo haciendo. Gracias a ella, he construido mis propios mundos, mis historias. Ha sido testigo de mi alegría, de mi tristeza, de mi mal humor, de mi esperanza y también de mi desesperanza. No hay nada que haya secado tanto mis lágrimas como un folio en blanco. No hay nada que haya contribuido tanto a que me desahogue, a que saque la rabia que llevo dentro, o la felicidad, o cualquier otra emoción que haya surgido en mí.

Ella, mi pequeña pero tan grande afición, no sólo ha resultado un modo de evasión o de disfrute. También ha sido la que me ha propuesto un futuro. Un futuro que, de salir bien, sería toda una experiencia, una maravillosa experiencia que anhelo desde mis mismísimos ocho añitos de edad.

Esto es para ella. Para esa fiel amiga que nunca me ha abandonado. Para esa compañera con la que siempre he podido contar. No es una persona, no es un animal, no es un ser viviente en el sentido físico. Pero sí vive, y de una manera muy intensa, en mi interior. Y está presente en todas partes, incluido este post... este minimalista homenaje es para ti, la escritura.

No voy a rendirme. A veces te me encabritas, pero, como en toda buena amistad que se precie, los vínculos han de forjarse con alguna que otra discusión. Y no pienso perderte como amiga. De hecho, pretendo que continúes siendo la mejor amiga que he tenido jamás.

Todo esto me hace recordar lo que escribí acerca de ti no hace más de un año...

Leyéndolo... Magia

¿Alguna vez has pensado en las pequeñas cosas que dan sentido a tu existencia? Tomar un papel en blanco, inspirar su aroma… acaba convirtiéndose en un instante único. Algo tan sencillo como llenar de tinta una hoja hace rebosar en tu interior cientos de emociones insospechadas. Navegas por el mar de la imaginación, descubres tus propias historias y te topas con sensaciones que ni siquiera creías conocer.

Lo que para otros es simplemente garabatos, a mí me hace vivir. Esas motitas de diversas formas no son más que comunicación, expresión y liberación. Combinándolas, puedes conocer a una persona sin mirarle a los ojos. Encajándolas, puedes introducirte en otro universo y evadirte del tuyo. Se trata de un dulce puzzle que debes construir. La diferencia reside en que está permitido seguir tus propias reglas.

¿Qué es éso tan abstracto que acabo de describir? Hay gente que lo denomina talento. Otros dicen que se llama inspiración. ¿Tal vez sensibilidad? Ciertas personas se asombran ante estas preguntas que me formulo. Algunos dicen que soy bohemia. Para mí sólo es magia. La magia de las letras.


Porque en la vida encontrarás que el éxito comienza en la voluntad del hombre... todo está en el estado mental.

2 comentarios:

Dani dijo...

Sí, ya la conozco. Me visita muy de vez en cuando, esta señora. Raramente, acompañada de su amiga la inspiración. Pero ahora entiendo donde pasan la mayor parte del tiempo... No lo impediré, están mejor contigo.

Marta González Coloma dijo...

Dani,

No te preocupes, son generosas y saben repartir tu tiempo. Seguro que te dedican un poquito a ti :)

Powered By Blogger